Por Raúl Sánchez Carrillo
Cuando el tema de los migrantes se analiza, no se considera que no en pocos casos, muchas vidas de las miles que caminan miles de kilómetros con frio, calor, sequía o enfermedades, son historias de extorsión o engaño. No se habla de las redes de traficantes de personas que nada les importa que México haya entregado al Salvador, Guatemala u Honduras, 30 millones de pesos en efectivo, para crear empleos. Nada tampoco les importa que México, ya no tenga las puertas abiertas ni que donde comen 2 pueden comer 4.
Ni que aquí los recibimos con abrazos y trabajo. La realidad que pone todo y a todos en su lugar por que la cruda verdad es que las cosas han cambiado y mucho.
Hasta no hace mucho tiempo, las cadenas humanas con caminantes de todas edades, mujeres y niños que han salido de Guatemala, del Salvador y ahora de Honduras, no se organizaban con pasar la voz de que una caravana vendría a México, de paso al sueño Americano que dejó de serlo hace varios años.
Los argumentos de que quienes quieran entrar a los Estados Unidos
deberán de solicitar asilo, es un túnel de humo. Ya deberán esperar tiempo indefinido en suelo mexicano, estar hacinados, viendo como la fecha de su audiencia será en semanas o meses.
Cuando llega la fecha van con toda ilusión del mundo a recibir un NO. No fueron aceptadas sus solicitudes. A continuación, otra espera indeterminada o buscar el regreso a su país, Desgastados, con problemas económicos, o de salud.
Los migrantes encierran tráfico de personas, trata de blancas, intentos de filtración de delincuentes y en general nubes de seres humanos que buscan salir de un país que no da oportunidades o seguridad.
La política migratoria se ha modificado con los golpes de mítines, intentos de fuga, que ya hemos visto como desde Camerún, África o Angola, vienen a transitar o a causar problemas sin un final feliz.
Si vienes a causar problemas, te regreso a tu país, palabras del canciller Marcelo Ebrard hoy retumban en los centros de concentración de indocumentados. En las barreras de la Guardia Nacional que, cumpliendo y solo cumpliendo órdenes, se han expuesto a pedradas, golpes y lo mas delicado al chantaje de mujeres y niños utilizados como escudos en los intentos de entrar violentamente a México.
Todo, por el Suchiate. Todo al tropel, todo buscando sorprender.
Donald Trump está satisfecho de que México este contendiendo los problemas. Y con sorna, sostiene que ´´como lo dije, México está construyendo y pagando el muro´´.
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