Bogotá, 15 Ago 2017.- La visita del vicepresidente de Estados Unidos a Colombia, Mike Pence, representó un importante espaldarazo al gobierno de Juan Manuel Santos, que busca blindar los acuerdos de paz con las FARC antes de que finalice su mandato en agosto de 2018.
El vicepresidente Pence realizó una visita oficial a Colombia este domingo y lunes, primera escala de su gira por América Latina, que incluye Argentina, Chile y Panamá, cuyo objetivo es fortalecer la relación de la administración de Donald Trump con América Latina.
La presencia del segundo funcionario más importante de la Casa Blanca fue relevante para Colombia, porque el presidente Juan Manuel Santos explicó a Pence las bondades del Acuerdo de Paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), incluso para la lucha contra las drogas.
La gira de Pence por América Latina coincidió con la certificación este martes por parte de Naciones Unidas de la entrega de armas de forma total y definitiva por parte de las FARC, después de 53 años de guerra contra el Estado.
El encuentro Santos-Pence, en la Casa de Huéspedes Ilustres, fue tan fructífera, que el funcionario al finalizar la reunión aseguró que “Colombia hoy en día representa el futuro de América Latina”.
“Bajo su liderazgo, señor presidente, Colombia hoy en día representa el futuro de América Latina. Es un futuro de libertad, seguridad y también prosperidad, y Estados Unidos está junto a ustedes”, dijo Pence, en lo que es el espaldarazo más importante recibido por Santos en su lucha por consolidar la paz en el último año de su mandato que finaliza en agosto de 2018.
El vicepresidente fue enfático en afirmar que su presencia en Cartagena “demuestra que Estados Unidos está con Colombia porque nuestra seguridad y nuestra prosperidad están inexorablemente unidas (…) Colombia no tiene mejor socio ni amigo que Estados Unidos”.
El encuentro Santos-Pence refrendó el apoyo de la administración Trump al proceso de postconflicto y a la lucha contra el narcotráfico y todos sus delitos conexos a nivel internacional.
Santos se comprometió con el vicepresidente de Estados Unidos a cumplir al máximo el plan para reducir los cultivos ilícitos, que es la gran preocupación de la Casa Blanca, una lucha que se facilitará con la incorporación a la vida civil de las FARC, que ocupaban zonas de plantaciones de hoja de coca.
Colombia puso en marcha un plan específico para desaparecer, en una primera fase de erradicación forzosa, 100 mil hectáreas de plantaciones de coca -de donde se extrae la cocaína-, de las cuales ya van 27 mil hectáreas.
Y la otra mitad se “está erradicando mediante sustitución voluntaria y ya se han arrancado 12 mil hectáreas, aunque más de 86 mil familias están comprometidas para superar las 50 mil hectáreas propuestas”.
“Lo estamos midiendo cada semana con la ayuda de la propia embajada de Estados Unidos, con el fin de garantizar su cumplimiento. Es una tarea titánica, pero la vamos a cumplir”, enfatizó Santos.
Pence también se comprometió a avanzar en la lucha contra las drogas en el propio territorio de Estados Unidos, que es el principal mercado de consumidores a nivel mundial y uno de los eslabones más importantes de toda la cadena.
Según el experto en narcotráfico, Ricardo Vargas, “el precio de la cocaína aumentó 149 por ciento entre enero de 2007 y marzo de 2015 (pues el gramo pasó de 98 dólares a 244) y la pureza disminuyó un 35 por ciento (pasó de ser de 67.1 por ciento a 43.6 por ciento)”.
Vargas, en un análisis que hizo para el portal Razón Pública, sostuvo que “la estrategia de reducción de la oferta que hoy predomina en el mundo se propone estimular precios altos y baja pureza por ser estos los dos factores clave para disuadir a los usuarios”.
Recordó que para la estadunidense Agencia Antidrogas (DEA), la disponibilidad de cocaína “en Estados Unidos se mantiene por debajo del nivel de 2006. Entre las 21 oficinas regionales de esta organización, solo cinco reportaron aumento de la disponibilidad en el primer semestre de 2015 (Houston, Nueva York, Filadelfia, Phoenix y Washington)”.
En este contexto internacional de paz y lucha antidrogas, cobra importancia para Colombia y la región la gira del segundo hombre más importante de la Casa Blanca, que servirá para delinear el futuro de las relaciones de Washington con América Latina, en materia de seguridad, comercio y cooperación.