Moscú, 11 Jul 2017.- Rusia está dispuesta a expulsar a unos 30 diplomáticos estadunidenses, congelar algunos de sus bienes y embargar dos inmuebles usados por la embajada en Moscú, en respuesta a las medidas similares que tomó Washington por la supuesta injerencia rusa en los comicios.
“Hay un acuerdo preliminar para celebrar en San Petersburgo un encuentro entre el vicecanciller ruso, Serguei Riabkov, y el secretario de Estado adjunto de Estados Unidos, Thomas Shannon; si no se logra un compromiso, tendremos que tomar esas medidas”, informó el diario Izvestia.
Según el rotativo, que cita una fuente de la cancillería rusa, sería una respuesta retardada a Estados Unidos que a finales de 2016 expulsó a 35 diplomáticos rusos tras acusarlos de espionaje a favor del Kremlin y ordenó el cierre de dos inmuebles en Centrville (Maryland) y Oyster Bay (Nueva York).
Tal medida formaba parte de un paquete de sanciones aprobado por el entonces presidente Barack Obama por la supuesta interferencia de Rusia en las elecciones presidenciales de noviembre de 2016 de Estados Unidos, una acusación que Moscú ha negado en repetidas ocasiones.
El canciller ruso, Serguei Lavrov, sugirió entonces expulsar de Rusia a 35 diplomáticos estadunidenses y prohibir que Washington siguiera usando una casa de campo en el noroeste de Moscú y un depósito en el sur de la capital rusa, en respuesta simétrica a Estados Unidos.
Sin embargo, el presidente ruso, Vladimir Putin, dijo que su país no se rebajaría a una “diplomacia primitiva” y se reservaría el derecho a tomar contramedidas en función de la política que aplicara el nuevo equipo de la Casa Blanca.
Rusia ha esperado durante meses que la nueva administración estadunidense reabra el acceso a las mansiones de Centreville y Oyster Bay, pero el primer encuentro entre Putin y Donal Trump, celebrado el viernes anterior en Hamburgo en el marco de la cumbre del G-20, terminó sin que el asunto fuera resuelto.
El canciller ruso calificó este martes de “escandaloso” que Estados Unidos siga sin reabrir las dos mansiones diplomáticas. “Es una situación escandalosa; una nación tan grande como ella, que se erige en defensora del derecho internacional, debiera avergonzarse por dejar pendiente ese asunto”, dijo Lavrov citado por la agencia Sputnik.