En diferentes ámbitos sociales, no políticos, sino sociales, el encono, la división y la confrontación están incrementándose. Las pláticas de refelexión de sobremesa se han convertido en terreno fértil para las agresiones y disputas, casi todas, fomentadas por las ocurrencias del López Obrador. Son arrebatos improvisados pero cargados de renvanchismo y rencor. En pocas palabras, los candidatos nos han dividido.Las conversaciones pasan de los reflexivo a la majaderia y al desafio. El pasado domingo se viralizo una imagen en donde se observa a una mujer que pasa a un costado del expresidente Vicente Fox al abordar un avión y le señala «señor ahora que llegue López Obrador a la Presidencia le van a quitar su pensión» poco después le acusa de haber robado «muchísimo» a México y aclara que ella vive en los Estados Unidos. El Centro Fox confirma que no conoce la identidad de la pasajera. Pero Fox, arremete y coloca lo que aparentaba un diálogo en un pleito. Bravucón como se caracteríza inició la revancha verbal y contestó «Lopitos en estos momentos acabas de mandar a una de tus majaderas huestes violentas a intentar agredirme en el avión a Houston. No, entiendelo, no nos vas a robar el país. Calmate y calma a tus persdoneros, a tus tuiteros, violentos y majaderos». Todos, principalmente, esperaríamos motra reacción de Fox, con más temple, con más madurez y tolerancia, pero sabemos quién es y cómo se maneja, pero ello no justifica su esgrima verbal tan coloquial pero tan violento. Pero como sea, este apenas es un ejemplo demoledor de lo que a nivel colectivo está sucediendo en el país. El discurso del odio, del rencor, de la división, ese sí esta penetrando más que los mutimencionados y saturados «spots». La violencia desatada nada bueno trae consigo y menos aún, como con esta dama, se lanzan acusaciones sin pruebas pero mostrando una seguridad en los dichos que no tienen ni base ni sentido. Si tenemos reclamos, si mostramos antipatía o más alla, si nuestro rechazo es absoluto a un candidato, nuestra manifestción debe de ir acompañada de datos, información y si se llega a alguna acusación, de pruebas. Lanzar improperios, calificativos o insultos es demasiado fácil pero meso sí, retara de lleno la personalidad e inconsistencia de quien las expresa.
Se comenta solo con…De la replica a la majaderia
