Carlos Ramos Padilla
10 minutos para una audiencia, para esposarlo de pies y manos y colocarle un traje propio de reo. Ahora Garcia Luna se va a Nueva York, pensamos incluso a compartir espacios con el chapo. En Dallas intercambió mirada con su familia. No hubo declaraciones. Como sea, Genaro Garcia Luna, de pie, fue exhibido como así ocurría cuando él mismo presentaba a delincuentes. Garcia Luna pidió un traductor, su deseo tratar su defensa en español. En 48 horas llegará a Nueva York. Aquí en Mexico la Fiscalía aún no presenta información ni cargos, pero si un permanente ataque mediático. La descarga de odio toca al expresidente Felipe Calderón aún cuando el propio amlo ha pedido mesura. Y así, cuando se detuvo al chapo muchos se frotaban las manos y esperaban datos, cifras pero sobretodo nombres de personajes en el Gobierno presuntamente vinculados al crimen organizado y hasta el momento, como diría Fox, no ha caído ningún pez gordo. Vamos, después de tanta rabia y promesas nadie de la llamada “mafia del poder” han perdido impunidad y ahora seguidores incondicionales del tabasqueño pretenden convencer a los confundidos que la detención del ex secretario de seguridad fue por el Gobierno de Mexico. A partir de esta fecha la rapiña informativa será intensa. Y ya veremos hasta dónde la Cuarta Transformación oculta como con Bartlett o Gomez Urrutia, las irregularidades que en algunos casos se podrían tipificar de delitos. Garcia Luna no es el único involucrado ni actuó sólo y aquí, no en Estados Unidos, deberían de tener los argumentos legales y pruebas para encarcelar a los corruptos y no esperar a que las cortes extranjeras nos generen información que aquí sólo se sostienen como campaña electoral porque a la hora de tomar decisiones pues tiembla el dedito y más si los involucrados son parte “del cambio”.