Carlos Ramos Padilla
No importa lo que diga el canciller, en ese orden, y luego el presidente. Esta creciendo la versión de que las presiones de la cúpula militar hacia el Ejecutivo Federal fueron de tal magnitud que Salvador Cienfuegos regresa a México por lo pronto sin cargos y en libertad. Dicen que no hay cargos pero al tiempo aseguran continuará su defensa y su proceso en tierra nacional (?!¿¡). Mucho se ha dicho que su aprehensión se debió al enfado de la DEA por haber permitido, así como así, la libertad de Ovidio Guzmán y que las consecuencias de negociar con el crimen organizado traerá mayores consecuencias. El ridículo del caso curiosamente se hace evidente tras la victoria de Biden luego de que amlo apoyó abiertamente a trump y ante la negativa de felicitarlo “porque aún no hay cifras oficiales”. También se filtró el enfado de los demócratas con Marcelo Ebrard no solo por la ceguera de no alentar una reunión de amlo con Biden en su visita a Washington y luego operar con la comunidad latina para apoyar al republicano. El caso es que la función diplomática no ha sido decorosa y si muy inexperta. Decíamos en colaboraciones anteriores “tiempo al tiempo” y estos errores monumentales así habrán de pagarse. si Biden maniobra para que Ebrard no continúe como interlocutor con el gobierno de nuestro país, pues sabemos que para amlo es tan reciclable que seguro lo “premiaría” con la Secretaria de Gobernación. Pero aquellos felices gritones que vociferaban sobre los nombres, eventos y acusaciones que saldrían de la boca del General Cienfuegos, hoy están calladitos, agachados y tratando de que sus públicas arengas no sean recuperadas en las redes sociales. Se han llenado la boca suponiendo que el Chapo, Garcia Luna y Lozoya embarrarían a cientos de exfuncionarios de administraciones pasadas en actos de corrupción. Salvador Cienfuegos no se había escapado de esta apuesta barata. Es un juego en contubernio con el presidente para hacer creer que ellos, los menos, son íntegros y honestos, y todos los demás, los muchos, son indeseables ladrones. Nada se ha probado hasta el momento. La carpeta personal de Cienfuegos debe estar cargada de información confidencial, de eso estamos seguros, por eso ahora los que celebraron están preocupados, el tiro por la culata puede dañarlos. Lo cierto es que el Ejército es una institución sólida que la han intentado erosionar tratando a los soldados como los calificó Epigmenio Ibarra de “asesinos”, como albañiles o dándoles tareas de policías. En este espacio sería bochornoso, innecesario y ridículo repetir las tonterías, por decir lo menos, de estos extranjeros, Abraham Mendieta y John Ackerman que viven de una absoluta protección de amlo y se burlan de las instituciones nacionales, por suerte hay grabaciones. Las Fuerzas Armadas merecen respeto y consideración y no ser calificados como crimínales en el extranjero sin prueba alguna hasta el momento.Aquel que deshonre el uniforme y se atreva a cometer actos de traición deberàn ser juzgados y castigados con la mayor se severidad y rigor. Pero eso de andar esculpiendo sobre el prestigio de Generales sólo por corresponder a esos falsos discursos de combate a los neoliberales, ternuritas y corruptos identifica únicamente a malnacidos y mercenarios, y en Morena se multiplican por montones.
*Presidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y tv
*Conductor del programa Va En Serio mexiquense tv canal 34.2