Carlos Ramos Padilla
Nuevamente la UNAM y su líder Enrique Graue muestran la fuerza y vanguardia de la Institución a pesar de los cotidianos ataques a su fortaleza. Derivado de la pandemia pero fundamentalmente de la interacción con las nuevas generaciones la UNAM se adelanta y propone nuevos esquemas de entendimiento académico, cultural y humano. “En la comunicación virtual están los nuevos cimientos de nuestra Universidad” expresó el rector Graue al instalar la Red de responsables en Tecnología de la Información y Comunicación. Se trata de una estrategia integral para la transformación digital e impulsar el aprovechamiento eficiente de las herramientas que proporciona la tecnología. Es decir, en tanto el gobierno incrementa costos e impuestos para la internet, la UNAM platea un esquema en donde al almacenamiento, divulgación, conocimiento y e información beneficiará a su comunidad y más lejos, a la ciudadanía con el esquema de extensión de la cultura. Y tiene razón el Rector, la UNAM (y yo añadiría el país) tiene que imaginarse diferente y planear su regreso a las actividades presenciales acompañadas de lo virtual para encontrar espacios de comunicación, establecer parámetros de calidad, identificar necesidades comunes y sinergias entre dos realidades. El que no se sume a esta sensibilidad y creatividad está fuera de la competencia en todos sentidos. Y es que en los jóvenes, en su tenacidad y sus expectativas está el futuro inmediato. Hoy el mundo se mueve desde una computadora, voy más allá, desde un celular. La gama de información, la energía de las redes sociales, la posibilidad de convertir un teléfono en radio, en televisión, en máquina de escribir, en espejo y hasta en escritorio de diseño para crear naves espaciales o ciudades solares, es real no ciencia ficción. Con un solo dedo en una sola tecla se puede estar en contacto real con alguien del otro lado del mundo, bajo los océanos o en el espacio. Gracias a estas tecnologías miles de seres humanos han salvado la vida atrapados bajo los escombros luego de sismos y que son localizados por el GPS. Las formas, las liturgias, los mensajes, los contenidos han variado como su prontitud, exactitud y velocidad. Las interacciones empresariales, decisiones gubernamentales, aplicaciones técnicas, debates académicos, conjeturas religiosas, todo, todo está hoy dentro de lo virtual. Ante eso me atrevería a preguntar, y por las experiencias extraídas de la pandemia, la educación media superior, superior y postgrados necesitan hoy actividad presencial o se podría avanzar mejor y con mayor calidad a través de acciones virtuales? y que conste que es pregunta
*Presidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y tv
*Conductor del,programa Va En Serio MexiquenseTV canal 34.2