Carlos Ramos Padillla
Finalmente los políticos dicen fuera al fuero, buena intención, se aplaude, pero hay dos pasos previos que deben de atender y que son elementales, fuera corruptos y fuera impunidad. De nada sirve eliminar el fuero si se cubren entre ellos como digamos, por ejemplo, el promover a personajes que son sospechosos de actos irregulares y los cubren en sus partidos y los meten a nóminas. Casos hay muchos, nombres sobran y de todos los partidos, miremos simplemente a los canddiatos de MORENA que están reprobados en sus expedientes públicos pero como López Obrador los considera «victimas» los convierte en plurinominales y san se acabo. Ahí está la figura se Sheinbaum o de Ebrad, y si nos asomamos a los otros partidos el salpicadero es majadero y hasta grotesco. Lo que deben hacer es terminar con la simulación y el engaño, o qué nos metemos al asunto de Odebrecht?. Quitar el fuero es un enorme avance, pero ahora falta la voluntad política, en serio, para limpiar la casa y tener ya en las curules y puestos de mando a gente responsable y cumplidora. La hipocrecia, la mofa, la ironía y repito, el engaño, en nada ayuda y principalmente en la política mexicana, tan desprestigiada, de eso se engolosinan. Quiénes por ejemplo, desde el poder estan alimentando las actividades del narco?, qué autoridades permiten que los crirminales tomen plazas y se repartan el botin? y mire que en todo caso eso ni con el fuero tiene que ver. O también nos asomamos en las complicidades para que la UNAM continue siendo dañada y sus instalaciones secuestradas?. Que no se confundan y que no intenten confundirnos. Hay que aplicar la Ley, a quién sea, donde sea, que los políticos dejen de ser personajes arriba de la sociedad con privilegios legales que ni en las Constitución aparecen, ahi sí, y con eso, les vamos a creer.